Project Cars

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Analizar un título de conducción y sobretodo uno tan prometedor como es Project Cars es difícil. El producto de Slightly Mad Studios, nació gracias a los jugadores a través de una financiación kickstarter y que consiguió como editora/distribuidora a la gran Bandai Namco.

Después de algunos retrasos puntuales y de mes en mes el 7 de mayo nos llegó este título de conducción.

Project Cars, conducción y contenido

El videojuego es un constante ir y venir de cosas buenas y en cierto modo, algún detalle agridulce. Tiene cosas muy buenas como pueden ser la cantidad de pistas, la cantidad de configuraciones tanto para jugadores con mando como para jugadores de volante. Además, de configuración en lo que a apartado visual se refiere, en opciones se encuentran multitud como si de un PC se tratase. El abanico de posibilidades a la hora de la configuración es inmensa, con lo cual Project Cars es un videojuego accesible para jugadores que no dominen el género y a la par también es un título que exige mucho si se configura en plan simulador. La desarrolladora ha hecho muy bien el orientar su producto para todo tipo de usuario, cada cual se lo puede configurar a su manera, como debe ser.

Lo agridulce es el poco contenido en lo que a coches se refiere o lo mal optimizado que llega a estar en su mejor exponente, la lluvia. No es que sea muy alarmante pero digamos que se percibe con cierta claridad.  Pero no nos adelantemos.

Si hablamos del modo principal, tenemos el modo competición donde el jugador se pondrá en la piel de un novato que tendrá que ir escalando por las diferentes competiciones, ganar trofeos y hacerse un hueco día a día en el mundo de la competición del motor. Desde un comienzo podéis escoger si comenzar con los Karts o escoger una categoría superior, dominar los Karts es importante aunque muy muy difícil, aquellos que vengan de títulos de conducción mas sencillos, tendrán que repetir en más de una ocasión las diferentes pruebas o carreras.

Nosotros como piloto debemos de asistir cada fin de semana de competición a estos torneos, según como nos clasifiquemos obtendremos opiniones tanto del periodismo como de los propios fans. Todo muy bien representado en pantalla, podremos leer estas publicaciones de periodistas y cómo nos diseccionan. Además, nuestros fans en un «twitter» virtual pondrán comentarios en tiempo real sobre nosotros al acabar cada carrera. Si has quedado entre los mejores serán comentarios muy positivos, pero si no has realizado las cosas debidamente, nos lloverán palos y piedras.

Dejando a un lado el modo competición, que es muy duro, en general es divertido. Terminar cada carrera para ver esas opiniones, en ocasiones es divertido, recibir correos de nuestros jefes o ayudantes dándonos consejos es fundamental para el progreso de nosotros como pilotos en Project Cars.

Otro de los modos y que quizá sea el más utilizado además del modo online, es la carrera rápida. Este modo que se sitúa durante los fines de semana de competición nos dejará escoger una carrera personalizada y configurarla a nuestro gusto al 100%; empezando desde el coche, pasando por la pista, el clima, las vueltas y la agresividad de los contrincantes. Todo muy pero que muy completo. Crear nuestro propia carrera de F1 con más de 60 vueltas y escoger el clima, pudiendo ser hasta variable en 3 formas diferentes, es muy gratificante. No nos olvidamos que en cada carrera y según nuestra configuración del videojuego, podemos hacer que se desgaste el bólido y tener que entrar en boxes para que nos pasen una rápida inspección para proseguir con la carrera.

En términos generales el modo carrera rápida nos ha gustado mucho, es mas es el modo donde más horas hemos invertido. Y el modo online en líneas generales además de resultar divertido como es lógico, funciona bien, pero siempre queda marcado por como todo juego de conducción, los contrincantes online usualmente no suelen ser «limpios» y las carreras quedan empañadas por las acciones de estos jugadores que la verdad es que liman la moral. Mejor montar una carrera online con tus amigos y gente conocida que juegue a Project Cars que otra cosa.

Como hemos dicho tiene un gran contenido detrás, empezando por los más de 30 circuitos, donde muchos se pueden aprovechar para jugar a una de las mayores bazas que tiene el titulo: los Karts. Esos pequeños coches donde los más pequeños se divierten pero que aquí también en los videojuegos los más experimentados podrán disfrutar como un enano.

Sobre la conducción y la simulación, tienen un gran nivel pero no llegan a niveles en PC como iRacing por ejemplo, pero si conseguís dominar a estas bestias de la carretera con un mando de consola y sin ninguna ayuda, habéis ganado muchísimo. Pero sobre todo aquellos que mas disfrutarán de la jugabilidad de Project Cars son los usuarios que tengan un volante compatible, disfrutarán de la inmersión que propone y la conducción que ofrece.

Uno de los puntos donde más decepcionados hemos quedado ha sido en el número de coches final. Es verdad que no hace falta tener 1000 coches para disfrutar de un juego de conducción, pero unos pocos más nos hubiera gustado. El número final es de 60, donde van desde los coches más urbanos, hasta F1,Karts o coches de alta gama. Al final quizás solo cojamos X número de coches, pero un poco mas de cantidad nos hubiera gustado más.

Gráficos

En el tema gráfico, artístico, ambientación…, Project Cars propone muchísimo y lo consigue, pero a costa de la optimización del título. SMS nos ha dado un juego de conducción que roza el fotorealismo, donde podemos poner en carrera más de 15 coches y sobre todo por el sistema climático. Aunque se queda  a medio camino de la excelencia.

Todos ya sabemos que las consolas de actual generación no son un portento, pero se podrían esforzar en optimizar el videojuego para que fuese a 60fps estables en carreras cotidianas y sin ningún efecto climático. Los bailes de frames en esas condiciones son notorios, cuando llegas a encontrarte con esa cantidad de coches es algo alarmante. Y no hablemos cuando pongamos lluvia o tormenta juntando a ese número de coches en pantalla, de los 40/45 frames no se mueve.

No todo es malo en el tema gráfico, como hemos dicho roza el sobresaliente y tiene cosas poderosamente buenas como la iluminación brillante y poderosa, tanto de día como de noche. Conducir un Pagani Zonda R con las luces de los faros delanteros en esos circuitos es toda una experiencia.

Ya anteriormente nos hemos parado a hablar del clima y que puede ser variable, pero no hemos hablado de la lluvia y cómo es su efecto en pantalla o mejor dicho, cómo no nos deja ver un milímetro y tenemos que luchar por controlar nuestro coche en cada curva para no salirnos y mantener la posición en la carrera.

Es una pena pues artísticamente y en su ambientación gracias a la poderosa iluminación que se gasta Project Cars roza el sobresaliente. Pero un juego de conducción debe basarse sobretodo en la experiencia plena y satisfactoria de conducción.

Si hablamos del apartado sonoro nos encontramos con un título potente, donde el rugir de los motores hará mas de una vez que se nos erice el pelo; esta vez sí se ha conseguido algo potente en este apartado, no tenemos queja y sinceramente, nos encanta. Por otra parte la voz femenina que nos acompaña dándonos consejos está en inglés, en ocasiones querremos que termine para ponernos rápidamente a jugar.

Conclusiones finales

Project Cars es un proyecto grande -muy grande-, desarrollado por un equipo pequeño que ha tenido que buscar ayuda externa para que el videojuego lo tuviésemos en nuestras casas. Por lo demás, en contenidos como modos de juego y/o circuitos es muy potente, rejugaremos multitud de veces muchos circuitos. Roza el sobresaliente en términos gráficos. Pero se ve empañado la experiencia final con el poco contenido en coches o la pobre optimización en según que circunstancias.