WWE 2K22

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“Esta noche vamos a presenciar el combate más esperado en la historia de la lucha libre profesional por el campeonato mundial de peso pesado. ¿Estás listo? Aficionados a la lucha libre, ¿están listos? De los miles de asistentes y los millones de espectadores de todo el mundo, ¡preparémonos para volver a vibrar!”

Así arrancaba Michael Buffer uno de los mayores eventos de todos los tiempos del wrestling americano. Y, como fan de joven del mítico pressing catch, mi corazón se emocionó recordando estas palabras al llevar varias horas en el juego. A continuación, os explicaré el porqué. Y es que, después de un parón de dos años tras una entrega que nos dejó boquiabiertos por su cuestionable calidad, este WWE 2K22 llega para hacernos recordar que el mayor espectáculo del mundo se ve en un cuadrilátero.

Porque sí, esta vez en Visual Concepts han hecho un gran trabajo, y recuperan esa sensación de que han plantado unos cimientos para que la saga pueda continuar.

Sin duda el gran cambio con respecto a la anterior y denostada entrega, es el sistema de energía o stamina. Porque, en un deporte que es puro espectáculo, no tiene sentido que ese factor determinara nuestros movimientos u opciones a la hora de combatir. Así que, en este sentido recupera esa sensación de los antiguos juegos de THQ.

Jugablemente el juego ha mejorado bastante, simplificando la fórmula al quitar la energía, permitiendo que los combos sean más sencillos de realizar o que, tanto las sumisiones como los contraataques sean más cuestión de estar atentos al botón que a realizar una tesis doctoral como hace años. Quizá los contraataques sean más fáciles que nunca, y el hecho de que el único castigo sea cuando se da o recibe una racha de golpes, pueda ser controvertida o, al menos, deba valorarse con el paso del tiempo. En este sentido, queda claro que el control gana en comparativa a su predecesor, permitiendo ser más divertido y asemejarse más al entretenimiento de lo que vemos en la vida real.

En cuanto a movimientos nuevos o míticos, si bien el número es bastante elevado, se echan de menos algunos de los grandes nombres propios. Aunque, en recientes parches han ido añadiendo alguno que otro, como el finisher de Umaga, por lo que puede que solo sea cuestión de darles tiempo a añadir más contenido.

El roster es bastante amplio, contando con más de 100 Superstars que harán las delicias del jugador. Y, como suele ser costumbre, más de 20 nombres para desbloquear con la moneda del juego.

El modo MyRise o Mi Leyenda, nos pondrá en la piel de un luchador elegido para el Performance Center junto a leyendas como Shawn Michaels, el cual nos ayudará en nuestro ascenso hacia alguna de las compañías de wrestling (SmackDown, Raw o NXT). Y, como no podía ser de otra forma, nuestras decisiones para elegir un combate u otro y, sobretodo, el resultado de los mismos, nos llevarán por caminos totalmente diferentes.

Este modo me ha resultado espectacular, pues aparte de que podremos ir eligiendo nuestra forma de avanzar, también estos minieventos que elegimos nos otorgarán puntos de experiencia para mejorar nuestro personaje en 6 apartados diferentes: Golpes, Llaves, En el Aire/En Carrera, Sumisión, Defensa y Tenacidad.

La primera, Golpes, nos permitirá tener más fuerza (y por ende más daño) en nuestros brazos y piernas. Las Llaves, indican lógicamente la fuerza de estas al agarrar a un oponente. En el Aire/En Carrera, nos elevará la velocidad y agilidad y los golpes o alcance de dichas técnicas. La Sumisión nos permitirá resistir mejor las llaves enemigas, como también nuestro poder para hacer rendir a un rival aumentará. La Defensa, nos permitirá revertir la situación teniendo más opciones de “contraataque” para atacar al enemigo. Por último, la Tenacidad consiste en nuestra durabilidad para aguantar golpes sin que nos rompan la cara, literalmente, o que librarnos del pin o cuenta a 3 sea más fácil… Como os explico, el sistema llevado en este modo de juego ha sido enormemente simplicado, lo que hace que sea muchísimo más agradable para alguien que se inicia, pero a su vez más divertido y disfrutable.

Más modos de juego son, por ejemplo, el modo Showcase en el que este año contamos (como la portada del juego indica) con el gran Rey Misterio, uno de los grandes nombres propios de la era WWE. Empezando por su debut hasta algunos de sus últimos combates, reviviremos algunos de los momentos álgidos de su carrera, como la mítica batalla contra Eddie Guerrero cuando eran compañeros de equipo, o su batalla en Royal Rumble contra el temible The Undertaker. A su vez, podremos desbloquear algunos vídeos en los que el Rey nos cuenta sobre su trayectoria. Un gustazo para los fans, y una enorme muestra del cariño que han puesto los desarrolladores al mimetizar tan bien este concepto.

También tendremos los clásicos modos de combate en línea con hasta 8 participantes. Suelen ser bastante divertidos, aunque en varios de ellos hemos tenido problemas con el lag para realizar alguna ejecución. Lo más gratificante del online es ver las creaciones de la comunidad, desde luchadores graciosos como Shrek, hasta copias exactas de luchadores imposibles de conseguir en el juego como Shawn Michaels o CM Punk. Además, también puedes descargar arenas, títulos personalizados o movimientos para parecerte más a una Superstar que te guste y no tener que pasarte un buen rato configurando todo.

Los modos exhibición, donde veremos una larga lista de luchadores con ganas de destruirnos. Y, a clásicos para desbloquear como Triple H, el citado anteriormente Undertaker o The Rock, entre otras leyendas de la historia de la lucha.

Aunque, he aquí el problema de siempre con respecto a estos juegos. Los grandes clásicos de la historia de la WWE están bloqueados, y necesitaremos pasar por caja para conseguirlos, pues utilizan la típica moneda que es prácticamente inaccesible en el juego normal.

MyFaction, es una de las grandes novedades de este nuevo título. A grandes rasgos, viene a ser el MyTeam o Ultimate Team de la WWE. Crearemos nuestra facción de luchadores, accederemos a retos y obtendremos recompensas variadas como puntos o sobres para aumentar a nuestras superestrellas y alcanzar niveles más altos. Es bastante divertido, aunque es lógico temer que Visual Concepts pueda caer en el error de NBA 2K o FIFA y perder el equilibrio entre el contenido gratuito y el de pago. Si logran mantenerlo, estoy convencido que este modo será bastante exitoso en años venideros.

Por último, MyGM es quizá la parte que más deja a deber. Si bien es más simple que en entregas anteriores, una vez que logras tener un equilibrio entre luchadores y rivalidades los desafíos son inexistentes. Esperaremos más de este modo próximamente.

Pero, ya que hemos hablado del combate y algunos de sus modos, vamos a hablar de lo técnico. ¿Cómo funciona el juego?

Evidentemente es un juego que no tiene nada que ver con el último de la franquicia. El salto técnico es evidente, notándose estos dos años y poco de diferencia muy buenos para el producto. Los errores en texturas o movimientos son prácticamente inexistentes. El modelado de los personajes está muy bien llevado; algo que me sorprendió bastante en el modo MyRise al tener conversaciones entre mi personaje y Shawn Michaels, por ejemplo, teniendo esa sensación de estar totalmente dentro del universo WWE. Aunque se mantiene alguna cosa regular de la saga, como las pocas ayudas de nuestra IA aliada en los combates por equipos, o el caso reinante llamado Royal Rumble y sus múltiples luchadores en el escenario. Eso sí, tanto en este como en Money in The bank, la simplicidad realizada para sacar del ring al oponente o para recoger el maletín, en mi opinión, se agradecen. Solo el tiempo dirá si es una buena jugada o no por parte de los desarrolladores, pero desde luego con esto se separan de lo que veníamos viendo. Como cimiento para reconstruir y enganchar a la gente de nuevo, me parece un acierto.

La banda sonora está muy bien, algo que siempre ha estado a la altura. Aunque, si que es cierto que se echan de menos algunas canciones más, especialmente para aquellos que gustan de configurar su propia superestrella con entradas distintivas. Pero, aún así, desde Bad Bunny a Motōrhead, cada persona tiene al menos un par de canciones que lo harán subirse al cuadrilátero.

En definitiva, el miedo que se pudiese tener a esta entrega por su pasado reciente se desvanece al primer combate, pues notas que en este tiempo el equipo de desarrollo aprendió de sus errores y nos ha traído un más que digno sucesor de aquel maravilloso juego de 2018. Así que, si eres fan, no lo dudes y sube al ring una vez más.