D4: Dark Dreams Don’t Die

8,5 Nota General
Gráficos: 7/10
Sonido: 8/10
Jugabilidad: 8/10

Toda la genialidad de Swery65 y Access Games en una aventura gráfica única

Que no sepamos si tendrá continuación

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Título: D4: Dark Dreams Don’t Die

Desarrolladora(s): Access Games

Editor(es): Microsoft Studios

Plataforma(s): Xbox One

Género(s): Aventura Gráfica

Lanzamiento: 19 de Septiembre de 2014

Idioma: Textos: Español, Voces: Inglés

Después del ya juego de culto que es Deadly Premonition, muchos esperábamos D4 como agua de mayo. Y es que Access Games y Swery65 se han ganado un sitio en el corazón de muchos jugadores. Su peculiar estilo, personajes y, sobretodo historias, hace que cada nuevo juego sea recibido con una expectación considerable. Y es que muchos quizá no saben que es exacamente D4: Dark Dreams Don’t Die. ¿Tiene algo que ver con su anterior obra?. Rotundamente no. D4 es algo totalmente distinto, único si me permitís decirlo.

Para empezar este análisis –gracias a Xbox por darnos la oportunidad de poder analizarlo– hay que dejar una cosa clara, D4 es una aventura gráfica muy del estilo de The Walking Dead. Esto es, movimiento limitados, investigación y una historia que seguir según nuestras acciones. Si bien D4 es algo más limitado que el juego de Telltale, si que tiene otras virtudes que hacen del juego una experiencia muy distinta. ¿Y por qué decimos esto?. Por ese aparato «maldito» que venía con todas las Xbox One hace unos meses: Kinect.

Y es que si bien D4 se puede controlar con el pad de toda la vida, es con el famoso periférico de Microsoft cuando el juego de Swery65 cobra un sentido total. Con él nos sentiremos el protagonista del juego, el Zack de David Young (nuestro héroe), controlando todos sus movimientos, gestos y acciones. Una integración total con Kinect que hasta nos deja beber Tequila como David u ojear revistas pasando las hojas. Pero claro, para que todo esto funcione Kinect debe tener una integración total con la historia y el gameplay del título.

El juego nos cuenta la historia de David Young, un detective que investiga la muerte de su mujer, Little Peggy. Solo sabe que el nombre de su asesino empieza con la letra D. Pero claro, David tiene una as en la manga para descubrir lo ocurrido. Es capaz de tocar pruebas de casos, llamados mementos, para viajar al momento clave de ese suceso. Y ahí es donde entra Kinect, dado que la clave del juego, tocar, es indicio del uso que se le quiere dar al aparato. Donde más y mejor uso se hace de Kinect en D4 viene de los momentos de acción y sus mecánica. Es difícil de explicar pero la integración es tal que no querréis jugar con mando en ningún momento. Ahora bien hay que tener cuidado con lo que hacemos, David tiene una barra de energía que si se agota caeremos rendidos y tendremos que reiniciar toda la escena. Para recuperarse debemos comer y, según lo que sea, rellenaremos nuestra barra en mayor o menor medida. Estos alimentos se pueden conseguir tanto investigando como comprándoselos a un familiar animal de compañía que no os queremos revelar. Pero no solo tendremos una barra de ebnergía. David tiene la habilidad de poder  ver lo más destacado del escenario, véase, las pistas destacadas. Una visión de detective que nos facilita el trabajo pero que por contra también se vacía conforme la usamos. Para rellenarla nada mejor que beber…

Mención especial se merece todo lo relacionado con el piso de nuestro protagonista. No solo es el comienzo de cada capítulo, si no que podremos volver siempre que queramos para hablar con otros personajes, escuchar música, beber, comer o pasar un rato en la habitación de David, pudiendo cambiar de ropa a los personajes (de serie hay varios atuendos, otros vienen por DLC gratuitos). Sí, también tenemos un baño, el cual es nuestro enlace entre las huellas y las investigaciones. Antes de que os lo preguntéis todo tiene un por qué, pero es mejor que lo descubráis vosotros. Entre el piso del protagonista y los escenarios del prólogo y capítulos hay muchos coleccionables que recoger como revistas que se pueden leer, «chapas«… algunos de estos coleccionables no se pueden recoger hasta una segunda vuelta, con lo cual estamos ante un videojuego muy rejugable.

En cuanto al sonido poco podemos decir. Música «made in» Swery65 que acompaña perfectamente y hace que muchas de sus melodías se nos queden grabadas durante días. Lo mismo para el doblaje (en inglés) que hace gala. Perfectamente escogido y lleno de matices. También es hay que destacar que el juego tenga una gran partida plus, en la que podremos ver cosas que no ocurren en nuestra primera visita al juego. Además el juego viene cargado de extras en forma de tajes y accesorios para los personajes, algo muy de agradecer.

D4 ha llegado para quedarse, aunque no sabemos si seguiremos jugando a las andanzas de nuestro Amigo David más allá del prólogo y de los dos capítulos que ofrece esta primera temporada. Más que nada porque Access Games no ha confirmado una segunda y no tenemos noticias de ello. Solo queda esperar y disfrutar de una joya que, a poco que os gusten las aventuras gráficas, no debéis perderos.

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Autor: admin Ver todos los post de