Según el medio Eurogamer, Microsoft ya no cobrará a los desarrolladores por las actualizaciones. Este tema ha sido muy escabroso ya que según se llegó a comentar, Microsoft cobra una importante cantidad de dinero por cada actualización a partir de la segunda (así es como funcionaba en Xbox 360).
Diversos desarrolladores han notificado que sigue existiendo una tasa inicial ligada al proceso de certificación de Microsoft, pero las siguientes no tienen ningún cargo. Esto ocurre tanto en títulos físicos como digitales, por lo que ahora las actualizaciones serán gratuitas. Aunque en todo esto hay una excepción: Si un desarrollador abusa o tiene un uso excesivo de dichos procesos de certificación para una misma actualización, la compañía se reserva el derecho a cobrar.
Microsoft, creó la tasa para alentar a los desarrolladores a que pusieran el máximo esfuerzo y la máxima atención para asegurarse de que sus juegos estaban completos y libres de errores antes de los lanzamientos.
